jueves, 14 de mayo de 2009

DECÁLOGO PARA CREAR UN DELINCUENTE. A PROPÓSITO DE LA MALA EDUCACIÓN




Emilio Calatayud, conocido por sus sentencias educativas y orientadoras, ha publicado un libro: 'Reflexiones de un juez de menores' (editorial Dauro), en el que inserta un 'decálogo para formar un delincuente'






Os invito a que leáis un DECÁLOGO PARA CREAR UN DELINCUENTE, que es un listado de consejos irónicos que invitan a la reflexión.


Antes de leer el catálogo, quien lo desee puede echarle un vistazo a este vídeo del citado juez. http://es.youtube.com/watch?v=K2GTauJT5Vg


Y, ahora, repasa estos consejos y ten valor para comentarlos con tus padres, pues fueron pensados para adultos/padres:


1. Comience desde la infancia dándole todo cuanto desee: así crecerá convencido de que el mundo entero le debe todo y le pertenece.


2. Reídle todas sus groserías, tonterías y salidas de tono: así crecerá convencido de que es muy gracioso y no entenderá cuando en el colegio le llamen la atención por los mismos hechos.


3. No se preocupe por su educación ética o espiritual. Espere a que alcance la mayoría de edad para que pueda decidir libremente.


4. Nunca le regañe ni le diga que lo que hace está mal: podría adquirir complejos de culpabilidad y vivir frustrado; primero creerá que le tienen manía y más tarde se convencerá de que la culpa es de la sociedad.


5. Recoja todo lo que vaya dejando tirado: libros, zapatos, ropa, juguetes,… Así se acostumbrará a cargar la responsabilidad en los demás y crecerá pensando que todo el mundo está a su servicio.


6. Déjele ver y leer todo lo que caiga en sus manos. Cuide de que sus platos, cubiertos y vasos estén esterilizados, pero no se preocupe de que su mente se llene de basura. Inculcarle un buen criterio no importa.


7. Riña a menudo con su cónyuge en presencia del niño, así a él no le dolerá demasiado el día en que la familia, quizá por su propia conducta, quede destrozada para siempre.


8. Dele todo el dinero que quiera gastar. No vaya a sospechar que para disponer del mismo es necesario trabajar. Que piense que basta con pedir.


9. Satisfaga todos sus deseos, apetitos, comodidades y placeres. El sacrificio y la austeridad podrían producirle frustraciones. Que todos sus deseos estén satisfechos al instante,… ¡de otro modo podría acabar siendo un frustrado!


10. Dele siempre la razón: son los profesores, los vecinos, la gente, las leyes… quiénes la tienen tomada con él.


“Y cuando su hijo sea ya un delincuente, proclame que nunca pudo hacer nada por él”.




Quien quiera más información sobre este juez le invito que eche un vistazo a: http://www.xlsemanal.com/web/articulo.php?id=19257&id_edicion=2287

jueves, 7 de mayo de 2009

MUERTE DEL SENTIDO COMÚN




Hoy lloramos la muerte de un querido amigo, Sentido Común.



Sentido Común perdió terreno cuando, por poner un simple ejemplo, los padres atacaron a los profesores sólo por hacer el trabajo en el que ellos habían fracasado: intentar disciplinar a sus díscolos hijos. Siguió debilitándose su salud cuando, por poner otro ejemplo, dimos la espalda al cuidado de nuestro planeta contaminándolo, deteriorándolo, agotando sus recursos,... así como cuando ignoramos el sufrimiento de nuestros semejantes.


El Sentido Común perdió el deseo de vivir en estos tiempos que corren, y finalmente murió.


La muerte del Sentido Común fue precedida por la de sus padres, Verdad y Confianza; la de su esposa, Discreción; la de su hija, Responsabilidad; y la de su hijo, Raciocinio.



Le sobreviven sus tres hermanastros:



“Conozco mis derechos”
“Otro tiene la culpa”
“Soy una víctima de la sociedad”.

viernes, 1 de mayo de 2009

MENSAJE ECOLÓGICO DEL GRAN JEFE INDIO SEATTLE

La tribu india de los duwamish había habitado desde siempre en el territorio situado en lo que hoy es el estado de Washington, en el noroeste de los Estados Unidos. A mediados del siglo XIX, el gobierno de los EEUU quiso comprar este territorio a la tribu, derrotada y agotada tras años de guerra.

El siguiente video recoge la respuesta que el gran jefe indio, Seattle, dio a los representantes del gobierno americano. Este discurso se ha hecho famoso por las ideas que contiene y por la magnífica oratoria con que son expuestas.

El discurso del gran jefe indio Seattle es importante porque presenta una visión del mundo y una visión de la naturaleza que hoy -tras grandes desastres ecológicos- aparecen dotadas de una profunda sabiduría que marca para nosotros el camino a seguir si queremos seguir el entorno natural del que formamos parte y cuya destrucción implica necesariamente la de la humanidad.

Hace más de un siglo y medio, pues, se elevó de entre los bosques vírgenes de Norteamérica la voz de un salvaje que no fue escuchada en su tiempo y que hoy tiene para nosotros el valor inmenso de una lección, que si la escuchamos y seguimos, puede ayudar a salvarnos.



“Enseñad a vuestros hijos lo que nosotros enseñamos a los nuestros: que la Tierra es nuestra madre. Lo que acaece a la Tierra, les acaece también a los hijos de la Tierra. Cuando los hombres escupen a la Tierra, se están escupiendo a sí mismos. Pues nosotros sabemos que la Tierra no pertenece a los hombres, sino que el hombre pertenece a la Tierra.

El hombre blanco que va en pos de la posesión del poder, ya se cree que es Dios, al que le pertenece la Tierra. ¿Cómo puede un hombre apoderarse de su madre? (…) Si nosotros no somos dueños del frescor del aire, ni del brillo del agua, ni del Cielo, ni de la Tierra ¿cómo se nos puede comprar la Tierra?”

GRAN JEFE INDIO SEATTLE (1855)

ÉTICA ECOLÓGICA II: CARTA DESDE EL FUTURO POR UN CONSUMO RESPONSABLE

ÉTICA ECOLÓGICA I